Primer actor Alberto Estrella, lleva diversión a niños de casa hogar del DIF Tabasco con su ´teatro de papel´

Con su ´teatro de papel´, el primer actor Alberto Estrella ofreció un rato de sana diversión a los niños de los cuatro albergues del DIF Tabasco, con el estreno del cuento actuado de su autoría, "Rutilio Mendoza, la rata olorosa".

Con una función especial para los 60 niños del albergue temporal, así como del Centro de Atención Integral a Niños y Adolescentes (CAINA) y del Albergue para Niños y Adolescentes Solicitantes de Asilo No Acompañados "COLIBRI", pudieron disfrutar de esta actividad organizada por el Voluntariado Universitario de la UJAT.

Se trata de un cuento lleno de moralejas y enseñanzas que aborda el tema del bullying, el rescate de los valores como la lealtad y la solidaridad.

"La obra me parece que tiene una moraleja muy fuerte de lo que está sucediendo estos días, sobre todo con las personas que tienen una discapacidad o capacidad diferente y además que combinas en esta obra un tema tan fuerte como que es el bullying y lo combinas con situaciones graciosas para hacerlo más para niños y que comprendan el mensaje. – Que inteligente, que claro, que conciso, muchas felicidades Aaron", expresó.

Por su parte, el reconocido actor de teatro y telenovelas, confesó que en su época de estudiante de secundaria fue también un niño ´buleador´, por lo que este tipo de actividades de entretenimiento y enseñanza para los niños es su manera de reivindicarse.

"Yo he procurado sobre todo desde hace como seis, siete años, que empecé con mi propio programa que se llama Alberto Estrella y el Círculo Teatral, que te invitan a leer, mostrar diferentes tipos de actividades a los niños dentro del área de los cuentos o el área de la novela o el área de los títeres o el área del teatro para niños y en esta ocasión decidí yo escribir un cuento, con unas ilustraciones de Aina Martelli que, son muy bonitas para procurar hacer que los niños reflexionen acerca de esta condición que hemos llamado ahora el bullying. 

"Yo lo confesé aquí, yo pertenecía a un grupo en la secundaria, que éramos los buleadores, desquitábamos tal vez nuestra propia frustración, nuestras inseguridades molestando a niños que tenían otra condición y es una manera de reivindicar también eso", expresó.