¡Es hora de hacer el gran cambio!

Enero 18, 2019 • 5 min de lectura

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En pleno año 2019, parece que el ser humano sigue siendo tan luminoso y tan mezquino como siempre.

Hemos descubierto que los grandes avances tecnológicos, no nos hacen mejores personas, y que la lucha por una mejor sociedad, comienza con nosotros.

Coexistir es quizás el reto más difícil de todo individuo, pero al mismo tiempo, el que mejor nos demuestra nuestra fragilidad, pues nadie puede satisfacer todas sus necesidades y las de su familia autónomamente.

Estamos obsesionados por ser millonarios lo más jóvenes posible, tener riquezas desbordadas, ser inmensamente bellos, mundialmente famosos, y ocupar el mejor puesto de la empresa sin tener experiencia.

Si lo anterior te describe, no te preocupes, no estas sólo, millones de personas en todo el mundo han tenido esos pensamientos y deseos, lo cual realmente no es malo, el problema surge cuando careces de los ideales, valores o conceptos que te pueden auxiliar para procesarlos, o cuando te pones en acción sin una orientación humanista.

En ese empuje desesperado y moderno por lograr todo lo antes posible, en esa carrera contra el tiempo, en ese enloquecedor ritmo de vida que nos exige nuestra actualidad, nos hemos deshumanizado, hemos dejado de tener espacio para ejercer la empatía, hemos abandonado el lado más luminoso de nuestra naturaleza.

Pero aún así, puedo afirmar que tú eres el principio del gran cambio, no necesitas estar santificado, ni que todos tengan la mejor opinión de ti, basta que te decidas a hacerlo.

A veces cambiar el enfoque de lo que significa la vida es de mucha ayuda para entender mejor estas palabras, y por ello, les voy a relatar la historia de un Ángel.

Es un Ángel real, porque ese es su nombre. Fanático de los superhéroes, tuvo la enorme fortuna de conocer y fotografiarse incluso con el mismísimo Stan Lee, el creador de Superman, Hulk, Los 4 Fantasticos, Thor, entre otros.

Lo conocí hace 3 días, y sin que el lo sepa, me ayudó a comprender que uno no viene a este mundo a comprar joyas, a comprar autos, a comprar casas, porque la vida amigos, es tu historia, es tu tiempo y en realidad es lo que eliges hacer con ella, y cuando peleas por tu vida como Ángel lo está haciendo, terminas de abrir los ojos a una realidad inmutable: la última de tus batallas, siempre será por tu salud.

Como Ángel hay muchísimas personas, pero no las vemos, no las comprendemos, no aprendemos de ellas, porque estamos muy ocupados estudiando, elaborando el presupuesto, terminando el proyecto, culminando el plazo, y dejamos de interpretar el mensaje que nos envían.

Quizás en realidad, sería mejor soltar un momento el celular, y platicar con tus padres, hermanos o amigos, cara a cara, como ya no se estila. Quizás, sólo por un momento, deberías intentar dejar el auto, y caminar a ese destino cercano, no es imposible, no se acabará el mundo, te lo prometo.

¿Te sientes desdichado, crees que el mundo te las debe, sientes que todos te tratan injustamente? Date una vuelta por un hospital, por una clínica de rehabilitación, o sencillamente acércate a visitar a tus abuelos o a ese pariente enfermo que tiene mucho tiempo no abrazas. Pronto comprenderás que tu riqueza no es material y que tienes muchas razones para estar infinitamente agradecido.

Dejar de robar, ser honesto, hacer las cosas correctamente, están en el espíritu de todos nosotros, antes de estar en leyes y en códigos. Quizás por eso ayer escuché en Telereportaje de ese taxista anónimo que ayudó a una señora a salvarle la vida a una niña, la llevó a un hospital y además no le cobró, o el otro caso de otro taxista que estaba desesperado por encontrar a un pasajero que había olvidado sus pertenencias en la unidad.

Esos ejemplos nutren, nos demuestran que en el mundo real, tu existencia tiene sentido a través de alguien más, quizás por eso practicar la empatía y generosidad no sea nada difícil después de todo, y convertirse en superhéroe de alguien equivale a ayudar.

Deja de preguntarte a que viniste a este mundo y sal a descubrirlo, empieza siendo amable y educado con todos los que te rodeen, se generoso y honesto, y trata de sonreír el mayor número de veces, conviértete de una vez en ese superhéroe que siempre admiraste, te garantizo que muy pronto tomarás conciencia que el gran cambio que estás buscando, en realidad nace en ti.