¿Acaso seré yo, maestro? (2a Parte)
Jesús Sibilla Oropesa
La semana pasada hicimos un recorrido con los posibles aspirantes por el PRI al gobierno del estado y de sus posibilidades; hoy analizaremos algunos posibles aspirantes perredistas, a la que pareciera para ellos inalcanzable silla de plaza de armas:
La Senadora Rosalinda López Hernández: Joven, hábil, inteligente, con camino recorrido en el terreno legislativo ya que ha sido diputada federal, diputada local, y actualmente senadora de la república, ha aprovechado las oportunidades que el mismo órgano legislativo le brinda para capacitarse y seguir estudiando; experta en el tema financiero, con origen y permanencia en el PRD. No sé que tanto le pese ser cuñada de quien pareciera haberse convertido en el más señalado adversario del partido solaztequista, y me refiero a Humberto Mayans.
El Diputado Federal Adán Augusto López Hernández. Su carrera se remonta a los tiempos del gobierno de Manuel Gurría Ordóñez, cuando llegó a ser subsecretario al lado de Enrique Priego Oropeza, era quien salía al paso de las protestas y demandas de los perredistas. Fue muy hábil coordinador de la primer campaña para gobernador de Manuel Andrade, estuvo a punto de ser gobernador de transición aquel diciembre de la anulación de la elección; se dice que dejó esperando a mucha gente y que no se lo perdonan. A partir de ese momento, se convierte en perredista en base a una gran amistad entre las familias López Beltrán y López Hernández. Ya fue diputado local, tuvo todo para ser candidato a la presidencia de centro y declinó despues de haber logrado el triunfo como diputado federal. Ha denunciado una y cien veces lo que él llama corruptelas del gobierno que encabeza Andrés Granier; es muy hábil para conseguir información, parece que tiene muy buenos contactos al interior del gobierno, no le va tan mal con los medios de comunicación. Al igual que a su hermana Rosalinda, parece que su mayor obstáculo, es el parentezco con aquel que han acusado de ser el autor de las famosas redes mayas.
El Senador Arturo Núñez Jiménez: de extracción priista, con extraordinaria carrera a nivel nacional, llegó a ser subsecretario de gobernación, con una sólida formación en la administración pública, se preparó para ser gobernador de Tabasco; Humberto Mayans ha sido su eterno adversario generacional. Cuando parecía que iba a llegar, alguna falla en su estrategia, hizo que Madrazo se inclinara por Manuel Andrade y en una histórica elección interna perdió la oportunidad de gobernar. Se afilió al PRD; tiempo después de ésto, se ha acercado y mucho a AMLO, con quien guarda amistad y respeto. Rayando en lo genial de sus declaraciones, es ocurrente y simpático, con basta formación, relaciones de amistad con casi todos los grupos políticos y medios de comunicación. Si Humberto es el candidato del PRI, seguro se polarizaría la elección; Arturo necesita caminar mucho más si quiere llegar.
El Ing. Octavio Romero Oropeza: Inició en la iniciativa privada, pero siempre inquieto, pronto con su personaje “Jodi”, que enviaba como colaboración a Telereportaje, se hizo popular hasta llamar la atención de AMLO que en ese tiempo vivía en Tabasco; desde que platicaron se identificaron plenamente y desde ese dia, han trabajado juntos por sus ideales. Ya fue diputado federal, presidente del PRD en Tabasco, oficial mayor del gobierno del DF, y ahora forma parte del llamado gabinete legítimo de AMLO. Pareciera que su suerte está atada a la del peje, y que si tiene aspiraciones en Tabasco, éstas están supeditadas al destino del de Tepetitán; la posibilidad de Romero Oropeza como candidato al gobierno se ven pues nebulosas, más que nada por ser un operador muy cercano a López Obrador.
Auldárico Hernández Gerónimo: ya fue senador y presidente de su partido. En varias ocasiones ha manifestado su disposición a ser candidato por su partido a la gubernatura del estado; el poeta y actor chontal se ha convertido en un crítico sistemático de su partido y ha abandonado al grupo de los pejes para convertirse en Chucho, aunque a él lo acusan de corrupción, él también es un acusador incisivo de corrupción al interior de su partido. A Auldárico también lo acusan de acercarse demasiado al gobierno y de atacar más a su partido que al propio sistema priista. ¿Llegará?
Dr. Fernando Mayans Canabal: ha sido diputado local y federal y candidato fallido a la presidencia municipal de Centro, se desliza bien entre el perredismo, aunque quedó golpeado de la última elección en que participó; tiene carisma y discurso, aunque parece ser otro posible damnificado de su propio hermano Humberto con el que atrás tiempo ha tenido diferencias por sus actividades políticas; tiene el apoyo de un ala del perredismo, veremos.
Javier May: El líder perredista en el Estado, de línea dura y muy cercano a AMLO, ha dicho no; sin embargo yo prefiero esperar porque a la hora de la hora podría ser opción en el momento de las decisiones, él ya no será presidente del PRD. Al tiempo.
Esta es la caballada perredista, por lo menos los que hasta este momento se pueden ver, no hay duda que el primer problema que enfrentan es la división de sus tribus, y la forma tan fuerte que tienen de criticarse y acusarse; si logran la unidad aprovechando la coyuntura crítica que sufre el gobierno podrían aspirar de verdad, si no vencen este obstáculo, tendrán que esperar nuevos tiempos.
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La Senadora Rosalinda López Hernández: Joven, hábil, inteligente, con camino recorrido en el terreno legislativo ya que ha sido diputada federal, diputada local, y actualmente senadora de la república, ha aprovechado las oportunidades que el mismo órgano legislativo le brinda para capacitarse y seguir estudiando; experta en el tema financiero, con origen y permanencia en el PRD. No sé que tanto le pese ser cuñada de quien pareciera haberse convertido en el más señalado adversario del partido solaztequista, y me refiero a Humberto Mayans.
El Diputado Federal Adán Augusto López Hernández. Su carrera se remonta a los tiempos del gobierno de Manuel Gurría Ordóñez, cuando llegó a ser subsecretario al lado de Enrique Priego Oropeza, era quien salía al paso de las protestas y demandas de los perredistas. Fue muy hábil coordinador de la primer campaña para gobernador de Manuel Andrade, estuvo a punto de ser gobernador de transición aquel diciembre de la anulación de la elección; se dice que dejó esperando a mucha gente y que no se lo perdonan. A partir de ese momento, se convierte en perredista en base a una gran amistad entre las familias López Beltrán y López Hernández. Ya fue diputado local, tuvo todo para ser candidato a la presidencia de centro y declinó despues de haber logrado el triunfo como diputado federal. Ha denunciado una y cien veces lo que él llama corruptelas del gobierno que encabeza Andrés Granier; es muy hábil para conseguir información, parece que tiene muy buenos contactos al interior del gobierno, no le va tan mal con los medios de comunicación. Al igual que a su hermana Rosalinda, parece que su mayor obstáculo, es el parentezco con aquel que han acusado de ser el autor de las famosas redes mayas.
El Senador Arturo Núñez Jiménez: de extracción priista, con extraordinaria carrera a nivel nacional, llegó a ser subsecretario de gobernación, con una sólida formación en la administración pública, se preparó para ser gobernador de Tabasco; Humberto Mayans ha sido su eterno adversario generacional. Cuando parecía que iba a llegar, alguna falla en su estrategia, hizo que Madrazo se inclinara por Manuel Andrade y en una histórica elección interna perdió la oportunidad de gobernar. Se afilió al PRD; tiempo después de ésto, se ha acercado y mucho a AMLO, con quien guarda amistad y respeto. Rayando en lo genial de sus declaraciones, es ocurrente y simpático, con basta formación, relaciones de amistad con casi todos los grupos políticos y medios de comunicación. Si Humberto es el candidato del PRI, seguro se polarizaría la elección; Arturo necesita caminar mucho más si quiere llegar.
El Ing. Octavio Romero Oropeza: Inició en la iniciativa privada, pero siempre inquieto, pronto con su personaje “Jodi”, que enviaba como colaboración a Telereportaje, se hizo popular hasta llamar la atención de AMLO que en ese tiempo vivía en Tabasco; desde que platicaron se identificaron plenamente y desde ese dia, han trabajado juntos por sus ideales. Ya fue diputado federal, presidente del PRD en Tabasco, oficial mayor del gobierno del DF, y ahora forma parte del llamado gabinete legítimo de AMLO. Pareciera que su suerte está atada a la del peje, y que si tiene aspiraciones en Tabasco, éstas están supeditadas al destino del de Tepetitán; la posibilidad de Romero Oropeza como candidato al gobierno se ven pues nebulosas, más que nada por ser un operador muy cercano a López Obrador.
Auldárico Hernández Gerónimo: ya fue senador y presidente de su partido. En varias ocasiones ha manifestado su disposición a ser candidato por su partido a la gubernatura del estado; el poeta y actor chontal se ha convertido en un crítico sistemático de su partido y ha abandonado al grupo de los pejes para convertirse en Chucho, aunque a él lo acusan de corrupción, él también es un acusador incisivo de corrupción al interior de su partido. A Auldárico también lo acusan de acercarse demasiado al gobierno y de atacar más a su partido que al propio sistema priista. ¿Llegará?
Dr. Fernando Mayans Canabal: ha sido diputado local y federal y candidato fallido a la presidencia municipal de Centro, se desliza bien entre el perredismo, aunque quedó golpeado de la última elección en que participó; tiene carisma y discurso, aunque parece ser otro posible damnificado de su propio hermano Humberto con el que atrás tiempo ha tenido diferencias por sus actividades políticas; tiene el apoyo de un ala del perredismo, veremos.
Javier May: El líder perredista en el Estado, de línea dura y muy cercano a AMLO, ha dicho no; sin embargo yo prefiero esperar porque a la hora de la hora podría ser opción en el momento de las decisiones, él ya no será presidente del PRD. Al tiempo.
Esta es la caballada perredista, por lo menos los que hasta este momento se pueden ver, no hay duda que el primer problema que enfrentan es la división de sus tribus, y la forma tan fuerte que tienen de criticarse y acusarse; si logran la unidad aprovechando la coyuntura crítica que sufre el gobierno podrían aspirar de verdad, si no vencen este obstáculo, tendrán que esperar nuevos tiempos.
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