“La tormenta que se aproxima” (parte 3)

Ahí está Javier librando la batalla de su cuenta pública de cuando fue alcalde, sus inquisidores lo han orquestado, acusa; ellos se defienden y aseguran que no es  asunto político, May señala al que ha denominado “el conspirador” de estar detrás, su propio coordinador en el Congreso aunque le brindó su respaldo lo exhibe, unos piden cárcel para el ex edil, otros se dicen dispuestos a defenderlo a costa de lo que sea, nada está definido.
 

En paralelo el líder amarillo trabaja en su estructura abajo con las bases para lo que viene, recorre el Estado, se da tiempo para organizar marchas, protestas, hasta se permite advertir una nueva jornada de “su lucha”, aunque omite los detalles, lo cierto es que habrá más, tiene que protegerse y calcula sus movimientos, sabe que entregará el liderazgo a principios del 2011 y tiene que asegurar una dirigencia fiel “al legítimo” que le ha brindado su confianza porque lo que está en juego es mucho más que una posición partidista.
 

Mientras, la contraparte minimiza las inconformidades y a quienes las encabezan, a “ese pequeño grupo radical” a como lo califican, aunque es evidente que les incomodan sus acciones, los discursos, las acusaciones, el simple existir, por ello como si fuera capricho u obsesión, dirigen sus baterías un día sí y el otro también contra aquellos que los cuestionan dejando sentir su enfado a través de los medios afines por mencionar solo un ejemplo. ¿Si no representan nada, a como aseguran, porqué parece que les afecta tanto?, ¿si son insignificantes, si no tienen de qué preocuparse, por qué les dedican tanto tiempo, dinero y energía?, ¿este es el momento adecuado para hacerlo?, ¿no existen otros asuntos mucho más relevantes de qué ocuparse?, ¿no es una provocación interminable entre unos y otros?
 

En consecuencia el escenario se polariza una vez más en “el edén” y el que debería construir los puentes haciendo uso de su “experiencia y oficio”, con sus declaraciones los colapsa y aunque asegure que no caerá en debates anticipados, el solo hecho de pronunciar palabra públicamente contra ellos tira cualquier remota posibilidad de diálogo o de apaciguar la intensidad de la confrontación dejando al descubierto que no le interesa evitar el choque.
 

Es claro, para la dirigencia del PRD el enemigo peligroso es Mayans, en cambio  para Humberto los suspirantes del Tricolor y el fuego amigo al interior de la administración incluyendo a su compadre, el de la silla de plaza de armas, le preocupan más que los amarillos, por lo menos ahora.
 

En tanto a“los exitosos López”, por como están las cosas se les acaba el tiempo, tendrán que definirse si es que no lo han hecho ya y decidir entre “el PRD” y sus “sueños políticos” o por “su familia”, sin duda su situación es sumamente compleja.
 

En consecuencia el enfrentamiento encarnizado entre Nuñez-Dirigencia y los hermanos legisladores se prevé inevitable y aunque Adán y Rosalinda le apostaran a su partido, el destino los coloca en una posición contraria al grupo rector que les complica su caminar, incluso si no obtienen el control en 2011 podría estar en juego su sobrevivencia a pesar de sus habilidades y del propio Andrés Manuel; es más, al mayor de los varones le pesa su pasado y a la menor de las mujeres no le conocen más allá de las tribus perredistas.