Francisco veía en Dios la salvación del infierno y las tentaciones
El infierno no es un sitio, sino un estado del corazón o del alma, consideraba
El Papa Francisco advirtió, en su momento, sobre las tentaciones que el demonio pone en el camino de los fieles para separarlos de Dios.
Dentro de estas seducciones enlistó el apego a las cosas, la desconfianza y la sed de poder.
Por ello, exhortó a usar el dinero para el bien de las personas, la familia y en caridad de quien más lo necesita.
Cabe señalar que para Francisco, el lugar de penitencia de los pecadores no era un lugar físico, pues llegar a considerar que el infierno no es un sitio, sino un estado del corazón o del alma.
Además, el Papa mencionaba que cualquier persona puede salir de las tinieblas simplemente acercándose al señor.