A medio año, surge el fantasma de los impuestos

La crisis del Covid-19 ha marcado la agenda económica en todo el mundo. El impacto de esta enfermedad se ve reflejado en los bolsillos de las familias, empresas, y desde luego en los datos macroeconómicos en todos los países y regiones del globo. La enfermedad que tiene paralizado a todo el mundo  ha obligado a los gobiernos a tomar medidas para impedir que el daño causado por la pandemia se convierta en permanente. 

La quiebra no solo es para los consumidores o para las empresas, sino de la misma manera se ven afectados los gobiernos, al bajar significativamente la recaudación en los impuestos. El Gobierno necesita liquidez, los gastos por la crisis del coronavirus se han multiplicado, mientras que los ingresos hacen aguas por la parálisis de la economía, de tal suerte que en cara al segundo semestre del año muchos de los gobiernos federales en todo el mundo se están planteando la posibilidad en el incremento de impuestos existentes o la creación de nuevos impuestos.

Son muchas las noticias acerca de cómo el Gobierno está pensando incrementar los impuestos para afrontar los costes de la crisis y financiar el gasto público en la fase post-covid-19, también conocida como ‘nueva normalidad’.

Con esta propuesta de sistema fiscal, el Gobierno ciertamente pone en movimiento la liquidez del sistema tributario, donde se desea recaudar 100 mil millones de peso, básicamente se está trabajando con la parte de arriba, es decir, los que cuentan con recursos, mientras que se mantiene igual para los que tienen menos ingresos. Las plataformas digitales no son un sector nuevo, pero hace años representaba una parte minúscula en la dinámica de la economía, sin embargo hoy en día la comunidad digital y tu utilización se ha ampliado a pasos gigantescos. 

Retomando la era postcovid, donde se espera un consumidor hiperconectado y un potencial crecimiento en el e-commerce, los impuestos a las plataformas digitales presentan un papel importante en la nueva dinámica económica.