Cuando estás inmerso en el dolor del duelo, te parece que nunca vas a poder salir de ahí

Foto: Charwin Acebuche en Pixabay

 

El dolor es una respuesta natural a la pérdida. Es el sufrimiento emocional que sientes cuando algo o alguien quien amas ya no está. Cuanto más significativa sea la pérdida, más intenso será el proceso de duelo. El duelo es una fuerte emoción que puede llegar a ser bastante abrumadora para las personas. Independientemente de si la tristeza se deriva de la pérdida de un ser querido o de un diagnóstico terminal que ellos o alguien que amaban han recibido. Las experiencias individuales varían y dependen de la naturaleza de la pérdida. La muerte de un ser querido es una de las situaciones más duras que tiene que enfrentar un ser humano. El duelo no es una enfermedad. La enfermedad sería no hacerlo. El duelo es doloroso, y no podemos hacer nada para evitarlo. No hay atajos, no hay una varita mágica. 

De lo único que no nos salvaremos en esta vida es de la muerte. A lo largo de nuestra vida nos tocará vivir diferentes duelos de personas queridas. La muerte es irremediable e irreversible. Entonces, ¿por qué vivir de espaldas a ella? "La vida es muerte y la muerte es vida". Octavio Paz, Premio Nobel de literatura en 1990 lo decía: “Una civilización que niega la muerte, acaba por negar la vida” O el también el reconocido escritor austríaco Stefen Zweig lo expresaba de esta forma tan clara: “No basta con pensar en la muerte, sino que se debe tenerla siempre delante. Entonces la vida se hace más solemne, más importante, más fecunda y alegre”. 

Algunas personas, por miedo a morirse o a que les pueda pasar algo, hacen diferentes rituales para prevenir o protegerse de ese miedo que, en vez de ayudarles, podrían acabar construyéndoles un problema. Pensemos los casos de hipocondría, de ansiedad, ciertas fobias, ciertos casos de Trastornos obsesivos compulsivos que deben de hacer ciertas conductas repetitivas esperando que sean mágicas para que no pase nada malo. 

El duelo presenta 6 fases o etapas que se presentan sucesivamente y en ocasiones se alternan:

1.- La negación: Es una manera de distanciarse emocionalmente del hecho, de no creerlo como un mecanismo de defensa para evitar el impacto. 

2.- El enojo: Se manifiesta la molestia con las personas, con el difunto, consigo mismo, incluso, con Dios.  

3.- La depresión: Es donde hay más peligro de estancarse, se produce un aislamiento del mundo. La doliente sufre, se angustia, y puede presentar enfermedades psicosomáticas y alteraciones del sueño. 

4.- La aceptación: Empieza a aceptarse el hecho, comienza costando hablar sobre ello y termina con pequeños comentarios sobre la pérdida. 

5.- La búsqueda del significado en su vida: Consiste en hablar de todo lo que ha implicado esa relación en la vida de la persona

6.- La elaboración y nuevas relaciones afectivas: Poderse vincular a otras relaciones sin que sea una sustitución de la persona perdida

Duración del duelo: La duración del duelo en promedio es de dos años, se inicia desde el momento en que la persona empieza a evidenciar la separación y acaba cuando éste la acepta definitivamente. 

- Aparte del duelo normal, existen otros tipos de duelos más complicados o patológicos: 

Duelo crónico - de duración excesiva, la persona no puede pasar página. 

Duelo retrasado - la reacción emocional no fue suficiente y se manifiesta tiempo después, desencadenándose por ejemplo, a través de recuerdos. 

Duelo exagerado - síntomas de intensidad excesiva e incapacitante. 

Duelo enmascarado - la persona no es consciente de los efectos de la pérdida. 

Duelo desautorizado - el doliente no es socialmente reconocido y su dolor no puede ser públicamente expresado. En este último caso, la ausencia de contacto de apoyo en el momento del acontecimiento traumático y en el tiempo posterior es, en sí misma, otra pérdida o trauma acumulativo.  

Duelo anticipado: En el duelo anticipado, la muerte se conoce de antemano por lo que se empieza el proceso o las respuestas emocionales antes de que se efectúe la pérdida. 

Las personas en duelo tienen ciertas necesidades que deben verse satisfechas para superar con éxito la pérdida: 

a) Necesitan ser escuchadas y tomar en cuenta toda su historia de la pérdida. b) Necesitan ser protegidas para que puedan expresar sus emociones. c)Necesitan ser validadas en la forma de afrontar el duelo, saber que esto que les pasa es natural, está bien hecho y no es malo sentirse así. d)Necesitan estar en una relación de apoyo desde la reciprocidad, sentir que la otra persona le entiende gracias a una experiencia similar o que la otra persona “sepa” de lo que está hablando el afectado. e) Necesitan definirse en la forma individual y única de vivir el duelo, que se apoye su manera de sobrellevarlo. f) Necesitan sentir que su experiencia de duelo tiene un impacto en las otras personas, que su dolor o su explicación de lo que está sufriendo marquen a los demás. g) Necesitan estar en una relación donde el otro tome la iniciativa ya que ellos no son capaces de, por ejemplo, empezar a hablar del tema. h) Necesitan poder expresar amor y vulnerabilidad enfrente de otras personas. 

En resumen, el duelo es un proceso con el que toda persona puede verse afectada o involucrada en algún momento de la vida. Cuando estás inmerso en el dolor del duelo te parece que nunca vas a poder salir de ahí. Sabes que nunca va a recuperar a tu ser querido. Pero todo lo que comienza tiene un final. De la misma manera que comenzó un día, tendrá también que terminar. Terminar no es olvidar, pasar página, abandonar al otro, ese es el gran temor de las personas en duelo. Por el contrario, tendemos a buscarle un lugar en lo más íntimo de nosotros mismos, un lugar donde la muerte no puede llegar… Un lugar donde seguir queriéndolo hasta nuestro último aliento y, al mismo tiempo, que nos permita abrirnos de nuevo a la vida. 

La psicoterapia Cognitiva y la Gestalt, mucho te ayudarán en tu proceso de superación. 

Psic Sara Campos Ch.  Torre Médica 1110 Segundo Piso Col Centro Villahermosa, Tab. Tel. 9933141178 Cel. 9931498830.