El presidente le cumple a Tabasco

 

No es un tema nuevo, pero es una cuestión que no había sido atendida; primero la Independencia y aún más reciente en el siglo XX en la Revolución, ya con la vida democrática en México, el sur sureste históricamente ha presentado demora en la integración de la cultura indígena, atraso en la zona del campo y la marginación en la infraestructura, estos han sido la constante en el sur del país. Por primera vez durante el siglo XXI, el Plan de Desarrollo en relación con las primeras acciones del presidente de la República, van encaminadas a cortar las brechas de desigualdad entre el sur-sureste, con respecto al centro y norte del país. 

No hay recetas mágicas ni respuestas que resuelvan todo, sin embargo, es muy claro que la inversión y la infraestructura por mencionar dos proyectos: la refinería y el Tren Maya, serán promotores de más inversiones y con un efecto multiplicador que deberá tener resonancia en los próximos años. 

No obstante, el presidente ha promovido la inversión en Tabasco, otorgando facilidad en los permisos que sean necesarios para contribuir en la estimulación de la economía tabasqueña, siempre y cuando se acaten a las leyes federales, así como contribuyendo al cuidado de las reservas naturales. 

En temas de programas sociales, se encuentra “Sembrando Vida”, que genera una coyuntura a las familias que su única fuente de ingresos es el campo; junto con el de “Jóvenes Construyendo el Futuro”, procreando oportunidades para la sociedad que presenta carencia en experiencia laboral. Estos programas han significado un gran avance para la inclusión social. 

Hay quienes quieren ver resultados mágicos y poner de un día para otro a Tabasco en la punta del plano nacional, sin embargo hay que reconocer que el rezago que tiene nuestra entidad, es producto de varias décadas de abandono de la política federal y de malas administraciones a nivel local. 

No hay duda que las primeras acciones empiezan a dar frutos, y habrá de ser a finales de este año y para el próximo 2021, cuando veamos descender las tasas de desempleo y veamos incrementar el circulante monetario en nuestro estado de manera significativa.