Los BRICS toman fuerza ante la posbile alianza comercial de Brasil con China

 

Hace apenas unos días que China se muestra fortalecida ante la consolidación de la integración económica en Asia, en la que de unirse la India, formarían (por mucho), el mercado más grande del planeta. La expectativa de que las economías emergentes más grandes del mundo se integren, teniendo como antecendete el crecimiento económico y tecnológico de varios países asiáticos, motiva que tanto la Unión Europea, pero sobretodo los Estados Unidos, tengan que voltear una vez más hacia esta región.

 

 

Ahora es Brasil quien desde este hemisferio ha levantado la mano y dando la nota en el ámbito económico global, al manifestar que negocia un tratado de libre comercio con el gigante asiático. Esto ha generado cierto nerviosismo en el cono sur, pues Brasil significa la primera economía sudamericana y hay quienes lo consideran una afrenta a sus socios comerciales en el contexto del Mercosur, particularmente para la Argentina, que estrena presidente electo en la figura de Alberto Fernández. Cabe destacar, que al formar parte del Mercosur, Brasil estaría impedido para celebrar acuerdos bilaterales con otros países (tendría que negociarlos en bloque), por lo que la afirmación resulta temeraria en el sentido de que significa una salida del Mercosur.

 

 

Sin embargo, a persar de los inconvientes, la ruptura y reconfiguración de acuerdos comerciales vigentes e incluso, las eventales represalias; Brasil se muestra muy decidio a enfocar sus baterías en la alianza comercial con China. Por otro lado, aunque el gigante asíatico, no se ha expresado recien al respecto, es una realidad que negocia con Brasil. En el ajedrez de la economía y la geopolítica, cada quien mueve sus piezas y Brasil, estaría asumiendo las conseucencias en el cono sur, pero China estaría cumpliendo una afrenta mayor justo frente a los Estados Unidos con quien vive ya tensiones comerciales importantes.

 

 

 

 

En los próximos días, seguramente veremos opiniones desde la Casa Blanca respecto del fortalecimiento y acciones estratégicas de economías emergentes, que deciden moverse entre sí, sin la presencia de los Estados Unidos. Sin embargo, esto ya es una muestra de la que hegemonía norteamericana no vive su mejor momento.