Para Gladys Cano

Les comparto una noticia que me ha impactado mucho y es que ayer jueves 4 de agosto falleció mi querida amiga Gladys Ethel Guadalupe Cano Conde.

 

 

Tengo entendido que tuvo un problema de azúcar y se le complicó con una neumonía que la mantuvo las últimas horas en terapia intensiva en el Hospital Juan Graham, donde lamentablemente falleció.
 
Tuve la fortuna de tratarle, de ser su amigo, hablábamos de vez en vez o nos enviábamos correos electrónicos, ya que ella radicaba en Teapa. Recuerdo que a principios de año vino a visitarme a la estación al terminar “Telereportaje” un viernes acompañada de su hijo quien se encontraba estudiando en la escuela de futbol del Pachuca y que recientemente se había regresado para ayudarle en su negocio, platicamos un rato y quedamos en volver a vernos, desafortunadamente no ocurrió, esa fue la última vez que vi a Gladys Cano.
 
Como política dejó huella en la forma de gobernar su municipio, enfrentada con el gobernador en turno supo imponerse y sacar adelante la encomienda, recuerdo por ejemplo que me contó todas las peripecias que tuvo que pasar para lograr los recursos en la Capital del País para su municipio, de sus viajes constantes a la Ciudad de México en ese periodo cuando fue alcaldesa para hacer antesala en las dependencias y lograr presupuesto para su Teapa querido, ya que el Gobernador de ese entonces la tenía bloqueada, por cierto, no pudo con ella. También fue diputada y ocupó algunas otras posiciones; como olvidar su paso por Televisión Tabasqueña en el gobierno de Enrique Priego y la vez que coincidimos en el consultivo de la industria de la radio y la televisión en Mazatlán, Sinaloa donde por supuesto se hizo notar, todo mundo tenía que ver con ella.
 
Fue una mujer de una sola pieza, seria, directa, práctica que buscó construir en beneficio de su gente.
 
Disfruté mucho sus conversaciones que estaban llenas de sabiduría popular, era un placer encontrarme con ella, hablábamos de todo, obviamente de política una de sus pasiones en la vida, pero también me confió momentos difíciles de su vida personal y siempre me sorprendió que nunca perdió el ánimo, sin duda se le va a extrañar y mucho, fiel radioescucha de “Telereportaje”, me reía cada vez que me reclamaba que no podía abrir su tienda porque se quedaba picada en el coche escuchando las entrevistas y no se quería perder ni un momento, esa era Gladys Cano, todo un personaje.
 
Por último quiero decir que Gladys fue muy amable y atenta conmigo y con mi familia y que lamento profundamente no haber podido despedirme de ella.
 
Envío condolencias muy sentidas a sus hijos, a sus hermanos, a deudos y familiares de Gladys Cano que falleció ayer, mi solidaridad y la de mi familia para todos ellos.
Descanse en paz, Gladys Ethel Guadalupe Cano Conde.