¿Quiénes presentan el síndrome de Diógenes?
El síndrome de Diógenes es un trastorno del comportamiento que se caracteriza por el total abandono personal y social, así como por el aislamiento voluntario en el propio hogar y la acumulación en él de grandes cantidades de basura y desperdicios domésticos. Afecta, por lo general, a personas de avanzada edad que viven solas. La persona que sufre de este trastorno se caracteriza por su aislamiento social, llegando a recluirse en el propio hogar, además de desatender absolutamente la limpieza del mismo y toda higiene personal.
El Síndrome de Diógenes es un trastorno obsesivo compulsivo de pensamiento repetitivo, el cual se empieza a observar cada vez más entre nuestra población, y consiste en la acumulación de objetos de cualquier tipo, por parte de los individuos de cualquiera que fuese su condición social, quienes no los consideran como desechos, sino como cosas que pueden servir o ser usadas nuevamente en el futuro. Es un síndrome específico de personas de la tercera edad, que llegan a descuidar los hábitos de higiene y usos sociales, y puede producirse por el simple aislamiento social que les lleva a la falta de contacto con sus semejantes, o también puede ser producto de un problema psiquiátrico que lo desencadene, como depresión mayor o demencia. De ahí la importancia de establecer un diagnóstico claro para tratar los trastornos concomitantes en caso de que existan, ya que son los que mantienen el síndrome.
Hay que aclarar que, a pesar de considerarse una enfermedad propia de ancianos, algunos de sus síntomas pueden empezar a presentarse mucho tiempo antes. Entre los elementos determinantes para la aparición de este síndrome están la soledad y el aislamiento social que padece la persona, y que le van a llevar a una rigidez de pensamiento, autoalimentado, con el que justificará cualquier acción. Entre las principales causas de su aislamiento suele estar la pérdida de la pareja, algo que puede suceder en cualquier momento. Generalmente intervienen causas diversas que pueden incluir desde rasgos de personalidad diferenciados, hasta factores estresantes. Como en la mayoría de los casos se presenta en personas de avanzada edad, se considera que su principal causa es el aislamiento o la soledad, aunque también puede ser de tipo hereditario. También intervienen otros factores que dependen básicamente del ritmo de vida de las personas, es decir, influye el nivel económico (crisis), la muerte de un familiar, y /o el rechazo de la familia. Aunque es necesario destacar, que “No” es necesario ser pobre o ser rico para ser diagnosticado como Síndrome de Diógenes”.
• Muerte de un ser querido.
• Aislamiento o soledad
• Rechazo por sus familiares y/o pareja.
Puede generarse también a raíz de otros trastornos mentales, porque el Síndrome de Diógenes aún no es reconocido como una enfermedad mental propiamente dicha, por lo tanto con los rasgos característicos de otras patologías puede desarrollarse un Síndrome de Diógenes.
Se considera que este Síndrome es una enfermedad para toda la vida, pero que puede ser controlada, para contrarrestar los daños que se producen a nivel cerebral. Principalmente el tratamiento que reciben estos pacientes va orientado a tratar las dificultades que se generan a partir del mal estado nutricional e higiénico, y se espera que con el tratamiento se pueda controlar de manera parcial; tomando una serie de medidas, para evitar de esta manera que se vuelva a repetir el mismo cuadro.
En lo que refiere al nombre “Síndrome de Diógenes” se ha generado un poco de discusión, debido a que proviene de la mitología griega, de un importante personaje conocido como Diógenes de Sinope, máximo representante de la corriente de los cínicos, cuya filosofía destaca que el ser humano debía vivir del modo más natural posible, renunciando a todo aquello que consideraban excesivo e innecesario. Por lo tanto Diógenes es un personaje anecdótico del cual se conoce que llevaba una vida solitaria, vivía desnudo y en un túnel, sin pertenencia alguna, pero como forma de protesta a todo lo relacionado con los bienes creados en la sociedad y todas las leyes que la regían. Muchas de esas razones son por las cuales se considera que el nombre debería ser reformado, ya que la explicación a su comportamiento tiene un por qué, mientras que, lo hoy considerado como Síndrome de Diógenes no se relaciona completamente con el Diógenes de la historia.
Es necesario destacar que en el tratamiento de los Síndrome de Diógenes, influye mucho la ayuda social, y con esto se vincula directamente a aquellas instituciones que faciliten la evolución del paciente, en estos casos como se refieren a pacientes adultos se recomienda la ayuda por parte de instituciones geriátricas o asistencia domiciliaria. Generalmente esta ayuda no está presente en todos los casos, pero también suele suceder que cuando se les presta la ayuda a las personas, estas sencillamente la rechazan, y si clínicamente no se les ha dado un diagnóstico definitivo no están obligados a recibirla. De ahí la importancia de una buena evaluación psicológica y psiquiátrica para en todo caso, tratarles en consulta de manera individual.
PSIC. SARA CAMPOS CHAVOLLA
AV. GREGORIO MENDEZ TORRE MÉDICA 2DO. PISO SALA A
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