En el ISSSTE Tabasco denuncian deficiente atención en el área de pruebas COVID
Derechohabientes del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores (ISSSTE), en Tabasco, denunciaron falta de personal y deficiente atención en el área de pruebas Covid.
Más de cien trabajadores de diferentes dependencias con plaza federal, que acudieron al consultorio para la atención de enfermedades respiratorias del hospital General “Dr. Daniel Gurría Urgell”, afirmaron que llegaron desde las 7:00 de la mañana y eran las 2:00 de la tarde, hora en la que sólo habían atendido a 23 de 101 que estaban en la lista de espera.
El hartazgo y preocupación de los trabajadores, en su mayoría profesores de diferentes niveles educativos, que dijeron presentar cuadros de tos seca, fiebre, dolor de garganta y cabeza, así como en el abdomen, los llevó a realizar una manifestación al interior de la sala de espera, para exigir que se diera celeridad a la atención.
Por lo que luego de que los videos de la protesta se viralizaron, la administración del hospital general instaló un equipo de triage, donde se le tomaban los datos personales, temperatura, presión y oxigenación a los pacientes, mientras esperaban a ser ingresados para la toma de la prueba PCR.
Al respecto, la maestra Carlota Galeana Franco, afirmó que llegó a las 11 de la mañana y no tenía esperanzas de pasar, pues el ingreso era lento, además, que aunque el letrero del consultorio dice que se atiende de lunes a domingo las 24 horas, esto no se cumple.
“No hay doctores, se le olvida a la Secretaría de Salud que somos humanos, ya nos están exponiendo más y en el trabajo, yo pertenezco a la Secretaría de Educación Pública, nos piden el certificado médico, y también la secretaría como patrón deben poner un módulo para que no nos juntemos, hay mucha aglomeración, -¿Cuál es el servicio que está usted requiriendo?- pues la prueba hija, sobre el Covid,… yo desde ayer ando detrás de los doctores, pero ya se habían ido, a lo mejor porque era domingo”, manifestó.
La docente apuntó que a ella la contagió su hija, quien también es maestra de primaria, y adquirió el virus por otra docente que se presentó a laborar y no avisó que se sentía mal, pues pensó que era resfriado común.