Falta de tecnología y poco acompañamiento de padres lo que influyó en rezago educativo, señala docente

Existieron dos factores para que en Tabasco se presentara un rezago educativo durante el desarrollo de las clases a distancia, concluyó la maestra Patsy Correa

En entrevista para “Telereportaje”, la docente, de segundo grado de preescolar, explicó que uno de los principales  elementos que afectó el desarrollo del proceso de enseñanza – aprendizaje fue la falta de acceso a la tecnología.

Pues explicó que, cuando inició la pandemia de COVID-19, ella daba clases en una comunidad rural de Comalcalco, donde no había acceso a internet y los padres no contaban con herramientas tecnológicas para que sus hijos tomaran clases.

No obstante, la catedrática expuso que fue transferida a la cabecera municipal de Nacajuca, donde la barrera de la falta de tecnología quedó atrás, sin embargo, ahora se enfrentó al interés de los padres de familia de estar al pendiente de la educación de sus hijos.

“Cuando me mueven a Nacajuca, en agosto del año pasado,  ya fue diferente, porque estando en la cabecera municipal, claro que ya hay más acceso, ya son niños, hijos de profesionistas, entonces tienen dispositivos móviles y me encontré acá con el interés de los papás y empezó con las videoclases”, expuso.

Y es que Patsy Correa indicó que cuando decidió dar clases por plataformas virtuales en tiempo real, del grupo de 25 alumnos que atiende, solo se conectaban ocho.

“En enero, como es el mismo grupo, cuando llegué era primer grado, ahorita sigo con ellos que están en segundo ya, y en enero empecé a conectarme con Google Meet pero ahí no tuve respuesta, de 25 niños se conectaron 10”, comentó.

Es por ello que la maestra concluyó que el rezago educativo también está marcado por el tiempo que dedicaron los padres en supervisar a sus hijos.

“Aprenden, y lo hablo también como mamá, aprenden los niños que los papás tienen interés, los niños que no, se están quedando, ahorita tuve la oportunidad, en noviembre, de hacer una evaluación presencial, entonces me doy cuenta que los niños que se conectan, esos niños sí lograron hacer su evaluación y mostraron avances, pero aquellos que sus mamás de plano no participan, en estas actividades a distancia están muy atrasados”, precisó.

En ese sentido, la docente previó que ahora que regresarán en enero a clases presenciales, los alumnos que no mostraron un avance en su desarrollo académico tendrán complicaciones de adaptación.

Por ello expuso que será un reto para los maestros encontrar un punto de equilibrio para que los que sí avanzaron no se retrasen.

“Sí van a presentar dificultad, porque lo vi en estas evaluaciones presenciales, como iban en orden de lista llegaban los que sí son constantes y los que no, ahí juntos, y es difícil porque ahora el trabajo presencial es doble para el maestro, porque la actividad la tengo que adecuar con diferente grado de dificultad, para los que sí avanzaron, pero al mismo tiempo ayudar a los que no”, externó.