“El famoso cubrebocas es no confiar en Dios”, señala el Obispo de Ciudad Victoria
Incluso pidió a los feligreses pedir con fe, de rodillas, a Jesús Sacramentado, que nos libere de lo que está pasando, pero sobre todo que nos libre del miedo que hay a la enfermedad.
“Para mí, para mí, a nivel personal, el famoso cubrebocas es no confiar en Dios, es no confiar en Dios, no confiar en Dios, yo entiendo que a lo mejor mañana estoy enfermo, a lo mejor, porque no soy inmune a nada, pero yo generalmente, así como me ven en mi rostro, así ando casi siempre, casi siempre, no es presunción en gracia de Dios”, señala.