Reformas en materia de agua y vapeadores reflejan una visión autoritaria y prohibicionista: PAN

El partido apuesta por la reglamentación en vez del control absoluto sin rigor técnico, exponen

• Candelario Osorio León
• Diciembre 14, 2025 - 08:00 p.m.
• NACIONAL

El dirigente nacional del PAN, Jorge Romero, criticó que las reformas aprobadas recientemente por Morena y sus aliados, en materia de agua y vapeadores, reflejan una visión autoritaria y prohibicionista, violatoria de los derechos básicos y de intromisión excesiva en la vida privada de las personas.

Acusó que la nueva legislación de aguas reduce la autonomía local, elimina certeza jurídica y politiza el acceso al vital líquido, en vez de garantizar el derecho humano a su disposición.

"El cártel de Morena presume que esta nueva ley ´garantiza agua para todos´, pero su iniciativa dice otra cosa... pretenden decidir desde la Ciudad de México cómo opera cada pozo, cada tubería y cada sistema municipal; permite el uso político del agua e impone reglas absurdas. El agua deja de ser un derecho humano estable y se convierte en un permiso que la Federación puede modificar o retirar", manifestó.

Respecto a los vapeadores y cigarros electrónicos, el líder panista advirtió que la prohibición total no ha demostrado ser una solución eficaz en ningún país y que, por el contrario, suele trasladar su adquisición a mercados informales sin controles de calidad ni vigilancia sanitaria.

"En el tema de los vapeadores se optó por una prohibición absoluta, una medida que ya hemos visto que no funciona: los productos no desaparecen, se van a la informalidad, aumentan los riesgos para quienes los consumen, particularmente los jóvenes, y eliminan cualquier posibilidad de regulación responsable", sostuvo.

Además, Romero expuso que el PAN apuesta por la reglamentación en vez del control absoluto sin rigor técnico y que únicamente sigue criterios ideológicos, así como en establecer normas claras para estos y otros temas de gran relevancia para nuestro país.

"La prohibición y el control absoluto no garantizan nuestros derechos ni respetan la libertad individual; simplemente trasladan el problema a un terreno más riesgoso", concluyó.