Deuda de justicia sigue vigente: Jesuitas tras asesinato de ‘El Chueco’

La deuda de justicia sigue vigente para la Sierra Tarahumara y para muchos rincones del país, sentenció la Compañía de Jesús en México, tras el homicidio de José Noriel Portillo, alias "El Chueco", presunto asesino de dos sacerdotes jesuitas en Cerocahui, Chihuahua.

El provincial jesuita Luis Gerardo Moro emitió un mensaje en el que dijo que la confirmación de la muerte del presunto criminal no representa la justicia tan anhelada.

A través del video, resaltó la necesidad de garantizar la seguridad para las comunidades de la Tarahumara, así como la implementación de las medidas cautelares de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) y de los compromisos asumidos por el gobierno.

“Ante la confirmación científica de la ejecución del responsable de los asesinatos de nuestros hermanos jesuitas Javier y Joaquín, reiteramos que estos hechos no representan la justicia, tan anhelada, por la Compañía de Jesús. A los jesuitas, no nos mueve el ánimo de venganza, sino de justicia de vida. Con tristeza, advertimos que la deuda de justicia sigue vigente para la Sierra Tarahumara y para tantos rincones de este país. Hoy, más que nunca, necesitamos garantizar la seguridad para las comunidades de la Tarahumara, así como la implementación de las medidas cautelares de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos y de los compromisos asumidos por los diferentes niveles de gobierno en la mesa de instalación el pasado 16 de marzo”, expresó.

El representante de los jesuitas rechazó celebrar el asesinato de “El Chueco”, al contrario, reiteró que es lamentable porque demuestra la barbarie y el fracaso de las instituciones en México.

Finalmente, anunció que la Compañía de Jesús invitará a construir memoria e impulsar la construcción, sin acostumbrarse a la violencia deshumanizante.

“La Compañía de Jesús rechaza celebrar el asesinato del perpetrador de los hechos, al contrario, creemos que es un momento lamentable pues muestra que estamos frente a más barbarie y ante el fracaso de nuestras instituciones. Los jesuitas nunca hemos callado hechos de violencia, y siguiendo la enseñanza de la Iglesia, apostamos por la vida en la que resplandece la perfecta justicia del evangelio, que dispone a reconocer y respetar los derechos y la dignidad de todas las personas. Durante los próximos meses, estaremos invitando a construir memoria e impulsando la construcción de paz con verdad y justicia. De ninguna manera nos acostumbraremos a la violencia deshumanizante”, finalizó.