Si consideramos que el divorcio o las separaciones de la pareja son cada día más frecuentes en las sociedades del mundo entero, también debemos tomar en cuenta que cada vez más niños y niñas tendrán padrastro o madrastra viviendo con ellos.
Así como hay buenos padrastros o madrastras, también los hay regulares y malos. De la misma manera se debe pensar en que hay hijastros o hijastras buenas, regulares y hasta agresivas o inconformes. Por ahora vamos a tratar el tema de los padrastros que incluye a las madrastras y en otra oportunidad hablaremos de los hijastros.
Hablar de los tipos de padrastros es tanto como hablar de los tipos de padres. Existen padres permisivos; cariñosos; aprensivos; enojones; indiferentes; complacientes; impositivos; sobreprotectores y los padres que se preocupan por buscar un equilibrio psicológico al educar a sus hijos en función de lo que consideran mejor para ellos.
En la consulta psicológica observamos generalmente, que la que se ocupa y se preocupa por lograr la armonía familiar es la mujer. El hombre es más ajeno a la familia, se encuentra normalmente en su trabajo y desempeña el papel de proveedor económico usualmente.
Por múltiples circunstancias la mujer de hoy, aparte de ser ama de casa, trabaja para ayudar con los gastos del hogar, llega a casa a ver las necesidades de los hijos, además dedica tiempo para atender al marido.
También debemos referir que hay varios “tipos” de mujeres: las hogareñas; las responsables; las ejecutivas; las liberadas; las oprimidas; las sumisas; las de pleito y las que buscan que su familia funcione bien. (Por mencionar algunos “tipos”).
Como se puede ver, es difícil generalizar y decir: todos los hombres, o todas las mujeres son “así o asa”; de la misma manera es difícil clasificar a los padrastros.
Analicemos la situación en sí y no a las personas. La situación es difícil para todos los elementos de la familia al convivir con un padrastro o madrastra.
ES DIFÍCIL PARA EL PADRASTRO (NOS REFERIREMOS TAMBIÉN A LA MADRASTRA) PORQUE:
- No sabe cómo manejarse en ese nuevo entorno o quizá no tiene la intención y se crean conflictos.
- Es un extraño al que se deben adaptar los chicos les guste o no pues lo eligió mamá.
- Es difícil para mamá porque la mayoría de las veces está entre la espada y la pared. Si hace o dice a favor de uno, el otro o los otros se molestan y viceversa.
- Estas familias con padre impuesto o adoptado, muchas veces viven un caos emocional.
Inicialmente para hacer este estudio vamos a observar qué pasa con los menores cuando llega a su vida un padrastro. La mayoría de las veces esos menores acaban de pasar por el proceso traumático del divorcio o la separación de los padres y veamos las consecuencias que esto acarrea:
• Los menores están tristes por la ausencia de uno de los padres.
• Los hijos a veces están afectados porque el proceso de separación de los padres fue difícil y traumático.
• Los menores son abandonados por el padre así como abandonó a mamá .
- Se forman un mal concepto del hombre o de la mujer que los deja.
• Tienen miedo al futuro económico que les parece incierto y preocupante.
• A veces se les quita de su ambiente rutinario o se les aleja de sus abuelos, de sus amigos, de su escuela o vecinos y eso les afecta.
• En ocasiones se quedan sin casa, sin mascota, sin sus pertenencias y sin juguetes.
• Ven a mamá sufrir o llorar y no saben cómo consolarla.
• Toman el rol de padre o madre y no quieren intrusos.
• Se alían a la madre y creen que ahora es toda de ellos.
• Temen que mamá encuentre pareja y se la critican o la rechazan.
• Extrañan al que se fue, lo idealizan y piensan que nadie lo podrá sustituir.
• Sienten o se les inculca miedo sobre un abuso sexual o una posible violación por parte del padrastro y le temen.
• Su pensamiento es infantil o inmaduro aún, no comprenden al padrastro y no saben cómo tratarlo.
• A veces están en plena adolescencia y su conducta complica más las cosas.
• Si el padre ausente interviene en contra del padrastro la situación es más difícil para todos.
• Intervienen las familias muchas veces y descontrolan más a los niños en su adaptación a la nueva figura paterna.
• Muchas veces los menores sufren de depresión, se aíslan, no cooperan y requieren de ayuda psicológica para que se les ayude en el proceso de desprendimiento del modelo paternal anterior y aceptación del nuevo tipo de familia.
Todos estos factores los deben contemplar tanto la madre de los menores que están viviendo la separación, como la nueva pareja. Algunos de estos aspectos mencionados, los viven incluso, los hijos que perdieron a su padre por su muerte. Un hombre que pretende unirse a una mujer separada o divorciada que tiene hijos, debe analizar lo que puede vivir con los chicos de su nueva pareja y prepararse para que todo funcione de la mejor manera.
Es recomendable que la madre prepare a los hijos y que se inicie la relación entre el pretendiente y los hijastros primero como una amistad. Mamá debe presentarlo primero como amigo y poco a poco como novio hasta que ya se adapten a la idea y lo acepten para convivir con él en familia.
Obviamente el pretendiente iniciará el trato con los menores de manera amigable, afectuosa, con respeto y con pequeños detalles tanto materiales como afectivos y se los irá ganando con honestidad y paciencia.
¿CÓMO PUEDE PREPARARSE EL PRETENDIENTE O QUÉ DEBE DE HACER?
• Tener una buena disposición y amar a la mujer para ayudarla en el mejor manejo de esos niños.
• Comprometerse y asumir ese compromiso que voluntariamente aceptó.
• Ser consciente de que esos menores no son culpables y que es normal que estén resentidos y renuentes.
• No tomarse de manera personal el rechazo de los niños, no es precisamente hacia él, sino a cualquiera que se acerque a mamá. Será cuestión de tiempo.
• Es importante que el pretendiente le ¨busque el modo¨ a los niños. Si el señor actúa de buena fe los niños lo perciben, se dejan querer, llegan a sentir afecto y aprenden a respetarlos.
• El prospecto a padre sustituto, debe querer a la pretendida y demostrarlo con hechos pues los niños lo toman mucho en cuenta. Si la golpea o la maltrata, lógicamente los hijos no lo van a aceptar ¿a qué hijo le gustaría que golpearan a su madre?
• El padrastro debe tomar en cuenta que de inicio los hijos de ella estarán celosos ya que antes mamá era toda para ellos y él debe aprender a manejar ese hecho.
• Debe tratar de conocer la personalidad de cada hijo ya que habrán unos más difíciles que otros. Los más difíciles son generalmente, los que vivieron el proceso traumático del divorcio más de cerca o de manera más consciente.
• Es importante que tome en cuenta que los hechos hablan más que mil palabras y para que se los “gane” debe ser coherente y congruente.
• No debe discutir con la esposa frente a los hijos, ya que cualquier roce, para ellos puede significar la amenaza de un nuevo divorcio o un nuevo abandono.
• No es conveniente que se los gane siempre con cosas materiales, ellos le agradecerán algún día cuando sean grandes que los haya formado con cariño, con valores morales y espirituales.
• El padrastro no debe ser absorbente ni ponerse celoso si mamá atiende a los hijos, lo conveniente es que la ayude con ellos en lo que pueda, incluso con la tarea.
• El debe recordar que así con los hijos la aceptó, ella no lo obligó.
• Algún día cuando el padrastro sea una persona mayor, cosechará lo que sembró, por eso es importante sembrar con amor, humildad y de buena gana. Al amor, no hay menor que se le resista, aun el más difícil se lo agradecerá y lo valorará. Corresponderá cuando el padrastro más lo necesite. Hoy por ti mañana por mí.
• Se recomienda que las correcciones o llamadas de atención las haga mamá, de ella aceptarán lo que sea pues es la madre. Si el padrastro (papá adoptivo) castiga, se lo tomarán a mal y difícilmente lo olvidarán o disculparán.
Es importante mencionar que hay familias con padrastro que funcionan bien y es lo más sano para todos. Es válido tomar en cuenta que en muchas ocasiones el padrastro viene de una separación, por lo tanto, es posible que entre de igual manera en su hogar anterior, otro hombre a desempeñar las funciones paternales como él lo hacía. Si en realidad adaptarse a los menores es un problema, te recomendamos buscar ayuda psicológica ya que todo problema tiene solución. Las terapias familiares son recomendadas en estos casos.
Psic. Sara Leticia Campos Chavolla. Consultorio Torre Médica. Av. Méndez 1110 Segundo piso. Col. Centro Villahermosa, Tab. Tel. 3141178 y Cel. 9931920934
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